viernes, 24 de enero de 2014

Mount and Blade Warband: Política e Imperio



Aunque el juego en sí mismo no tiene fin, se puede considerar que el objetivo a alcanzar es la conquista de todo el mapa de Calradia, eliminando en el proceso a todos los reinos y unificando el continente bajo tu estandarte.

Hay dos partes fundamentales a la hora de construir tu imperio: La preparación y la conquista. Son etapas diferenciadas que ocuparan una parte gigantesca de nuestro tiempo y esfuerzo. Describiré a continuación que hacer en cada etapa y cómo hacerlo


La preparación del Imperio

Lo primero y más fundamental tener una gran cantidad de dinero y un ejército fuerte, pero, solo con eso, no duraríamos ni dos días contra los reinos enemigos por muchas batallas que ganemos. Así pues, tendremos que integrarnos en alguna facción y ponernos bajo el mando de un rey, ya sea como vasallo o como mercenario. La diferencia es bastante clara: los mercenarios reciben un sueldo periódico por prestar sus servicios al rey pero no pueden tener posesiones dentro del reino. Un vasallo si tiene pueblos (que generara un ingreso periódico dependiendo de la calidad y el desarrollo de estos) y puede aspirar a tener castillo. En todo lo demás, es similar, aunque siempre es más fácil hacer amigos siendo mercenario ya que te mandan más misiones que siendo vasallo

Para legitimar nuestra aspiración al trono, necesitamos “Derecho al trono” Esto sirve para que, una vez nos independicemos, no nos declare la guerra toda Calradia. Las dos formas de obtener “Derecho al trono” es cuando el rey al que sirves firma la paz con un enemigo o bien cuando mandas a los personajes que te encuentras a propagar tu nombre, sabiduría y justicia. Esto se consigue de manera sencilla hablando con el personaje una vez este en nuestro ejército y diciéndole que quieres ser pretendiente al trono imperial (NOTA: Busca rápidamente a estos personajes en la taberna y mándalos nada más encontrarlos. Solo puedes enviar uno cada vez. Así mismo, no mantengas a personajes que ya hayas mandado a ese tipo de misión excepto que sean nobles) Nunca recomiendo independizarse con menos de 50 puntos de "Derecho al trono”



Los personajes tienen conflictos entre ellos, lo que hara que baje su moral y puede que no nos apoyen o nos abandonen. Para eso, evita tener a personajes con conflictos entre tus filas o si los tienes, procura ganar muchas batallas para que la moral este alta siempre


Si esto te parecía mucho, aún hay más que hacer. Para poder independizarte con éxito, necesitaras amigos entre los vasallos de otros reinos. Esto te permitirá al mismo tiempo aumentar tus fuerzas y disminuir la del enemigo. Es recomendable que tengas muchos amigos no solo en una facción sino en varias. La verdad que el proceso para ser amigo de alguien es muy largo y pesado. Tendremos que hacer misiones para los vasallos (desde recaudar impuestos a matar a delincuentes pasando por mensajero), ayudarles en batallas, rescatarlos de prisión, casarnos, apoyarlos en sus pretensiones etc. Lo que más aumenta la relación con ellos es sacarlos de la cárcel, dejarlos libres tras capturarlos en batalla y ayudarlos en el combate. Aun así os digo que es un proceso desesperantemente lento


La forja del Imperio

Vale, nos hemos tirado jugando muchos meses (si, se puede llegar a tardar meses en tener todo preparado, así que espero no desalentaros) y ya contamos con un gran ejército, mucho dinero y unos buenos amigos, al mismo tiempo que unos personajes desarrollados ¿Ahora qué?

Ahora es el momento de tomar alguna fortaleza o ciudad. La primera ciudad que tomemos sin que seamos vasallos o mercenario de nadie será nuestra capital, donde tendremos un ministro que nos informara de las novedades del reino y que será con quien tendremos que hablar cuando queramos mandar un diplomático (que deberá ser uno de nuestros personajes) a otro rey. (NOTA: Si eres varón y te has casado, tu mujer será una excelente ministra y liberara a unos de nuestros personajes de tal cargo). Recomiendo que la primera conquista sea sobre una ciudad del reino más débil que haya. Esto nos permitirá obtener unos ingresos adicionales (las ciudades dependiendo de su prosperidad generan ingresos, una buena zona de reclutamiento (en la taberna siempre hay algún mercenario) y un buen punto de defensa.

Obviamente, si conquistamos una ciudad, su antiguo propietario quiera reconquistarla y comenzara una guerra. Esto es muy importante, ya que deberemos seguir aumentando nuestra conquista lo más rápido que podamos para debilitar al enemigo, al mismo tiempo que tendremos que derrotarlo constantemente en el campo de batalla para matar a sus tropas y capturar a sus líderes (cosa fundamental para acabar y/o ganar una guerra, ya que sin líderes no habrá ejércitos enemigos. Una vez capturados, mételos en las cárceles de una ciudad fortificada y no aceptes rescates)

A medida que vayamos conquistando nuevos castillos y ciudades, tendremos la opción de dárselo a alguno de nuestros súbditos. Aquí tener amigos es importante, porque aparte de nuestros personajes, podemos fichar a vasallos de otros reinos y darles tierras y que ellos nos ofrezcan su espada y su ejército. 

A medida que te expandas, el enemigo te atacara para reconquistar sus tierras, por lo que es importante defenderlas. Si eres capaz de meter 300 unidades por plaza fuerte, serás inexpugnable, pero hay que ser  consciente que toda unidad ya esté en un castillo o bajo tu mando cobra un salario (aunque los acuartelados no comen, lo que es una ventaja) Así pues, cuando conquistes algo, recluta aunque sean tristes milicianos y acuartélalos

Si te da mucha pereza o simplemente no puedes acabar con tu enemigo, puedes mandarle un emisario para negociar la paz. Suelen ser bastante tozudos y aunque les tengas de rodillas, normalmente siguen queriendo guerra (especialmente si no tienes muchos vasallos propios saldrá “El reino XXXX se está imponiendo a (el nombre de tu reino) en los campos de batalla”

Si por fin acabas con un reino, tu objetivo será expandirte. No seas necio y comiences guerras contra dos o más reinos. Se inteligente y declara la guerra a aquellos reinos que ya estén en guerra o que sean muy débiles. En tiempos de paz, dedícate a aumentar tus defensas, tus tropas, gana torneos, inspecciona la lealtad de tus súbditos e intenta convencer a otros que se unan a tu causa. Todo ello favorecerá tu causa y hará que conquistes todo el continente de Calradia

La siguiente entrada tratara sobre consejos generales para hacer vuestro paso por el juego algo más sencillo y ameno

2 comentarios:

  1. Es un poco desalentador el que haya que dedicar tanto tiempo a la preparacion del imperio, pero el juego bien vale la pena

    ResponderEliminar
  2. Despues de tanto esfuerzo funde el Imperio Swadiano Germanico jeje (pone Germanico porque tengo la bandera del aguila prusiana) con capital en Praven

    ResponderEliminar