martes, 29 de abril de 2014

Critica a Hearthstone



                Hace ya un tiempo escuche hablar de un juego de Warcraft en versión carta y la verdad, no sabía cómo sentirme. Es bastante cierto que fui un gran fan y seguidor de los juegos de estrategia de esta saga (especialmente con el Warcraft II y III) pero nunca me llego a convencer del todo el WoW, juego del cual parte el Hearthstone. Así pues no sabía cómo sentirme hasta que hace cosa de un mes y demás decidí probarlo y, la verdad, ME GUSTO y bastante

                Nada más entrar solo te dejan jugar con un personaje, la maga, con un mazo preestablecido. Las primeras batallas son bastantes sencillas, pero me gusto la mecánica de combate, la variedad de cartas y la relativa sencillez de las reglas

                Una vez pasas lo que podría llamarse el tutorial, puedes jugar para desbloquear el resto de personajes. El juego nos permite ponernos en la piel de 9 personajes distintos. Cada uno tiene una habilidad especial y cartas únicas relacionadas con su oficio, lo que marcara nuestra estrategia en cada partida

 Aqui tenemos los distintos personajes jugables


                Lo que más me gusto del juego frente a otros juegos similares, es la relativa facilidad para progresar y hacernos con más cartas. Cierto es que podemos pagar dinero real por las cartas y así crecer rápidamente, pero la inmensa mayoría de nosotros preferimos no pagar para jugar. Para ello tenemos la opción de gastar nuestro oro (que se obtiene ganando partidas y completando misiones) en comprar un sobre de 5 cartas para mejorar nuestro mazo. Así que, simplemente, si queremos prosperar en el juego necesitamos jugar y así no nos quedaremos estancados

                El tema de las misiones con la suculenta recompensa en oro es, bajo mi punto de vista, un gran acierto para el juego. Las misiones son muy distintas, desde ganar con ciertos personajes a hacer ciertas cosas como usar hechizos o destruir esbirros. Esto hace que tengamos que probar todos los personajes en partidas contra jugadores reales y que difícilmente lleguemos al hastió por querer potenciar un personaje al máximo y no conseguirlo.

                La variedad de modos de juego es bastante curiosa. Tenemos la posibilidad de jugar contra la maquina en varios niveles, jugar en el modo normal contra jugadores de nuestro nivel, jugar contra jugadores de distinto nivel para abrirnos hueco en el ranking o en el modo arena. La primera opción sirve para practicar con nuestro mazo, la segunda y la tercera es el juego propiamente dicho y servirá para medirnos contra otros jugadores y el cuarto modo es una mezcla de azar y estrategia, ya que no jugaremos con nuestro mazo sino que tendremos que crearlo con unas cartas que nos darán aleatoriamente y un personaje a elegir entre tres.

                  Otra cosa que me encanta son las voces de los personajes y de las cartas cuando las usas. Hay algunas que son realmente divertidas de usar solo por escuchar lo que dicen (Aunque este detalle no deje de ser una simple anécdota, enriquece muchísimo el juego)

 El aspecto gráfico del juego es muy limpio y muy colorido

                Aunque el juego es entretenido y me gusta, hay algunas cosas en las que peca bastante. Algunos son detalles a pulir y otro son simple gustos personales.

                Uno de estos fallos es la descompensación entre personajes, pero no tanto por sus habilidades sino por sus cartas propias. Podría decir sin demasiado miedo a equivocarme que Jaina, la maga, es por bastante el personaje más fuerte del juego. Si ponemos un caso hipotético en el cual este personaje lanzase todo su arsenal mágico a la vida del contrincante, haría nada menos que 24 de daño (sin potenciar) y varios hechizos para barrer la mesa del contrario de cualquier esbirro. 

                Otra cosa que no me convence es que es difícil ver cartas nuevas. Por regla general, más que menos, todos usamos las mismas cartas (Aunque claro, quizás esto venga por el hecho de haber jugado a las Magic y a las Yugi mucho tiempo)

                He de reconocer que una de las cosas que más me desanimo al principio fue la total aleatoriedad con la que te tocan las cartas en los sobres. Yo jugaba con la pícara y nunca me tocaba ninguna para potenciarla por muchos sobres que consiguiera. No obstante, los de Blizzard dieron en el clavo con la solución: El polvo arcano. El funcionamiento es simple, te deshaces de las cartas que no quieres, las transformas en polvo y luego pagas con ese polvo las cartas que si quieres. Así la suerte no es tan importante para el desarrollo.

                Por ultimo deciros que mi recomendación es que os bajéis el juego para pasar las horas ociosas del día por ser entretenido, dinámico y por no requerir mucho ordenador para tirar del (aunque os tendréis que bajar también el Battle.net)

                Así mismo os dejo mi Nick: Ristofer por si queréis agregarme y echar unas partidas que siempre se agradece (o  dejadme en los comentarios vuestro Nick y seré yo quien os agregué)

sábado, 26 de abril de 2014

10 consejos para el Modo Liga Imperium III


             Tras echas unas partidas contra la máquina y hacerte con todos los territorios en el modo conquista, querrás probarte contra jugadores reales. La manera más sencilla de hacer estos es jugar en el “Modo Liga”, donde nos enfrentaremos aleatoriamente contra otros jugadores con unas reglas prestablecidas. Aquí van algunos consejos para que los nuevos en este modo puedan conseguir la victoria: 


              1 Parace una tontería pero cuando jugamos contra la maquina solemos poner una serie de reglas como más oro, algunos quitan la niebla o una población más alta. En este modo no tendremos ningún tipo de ventaja, así que es recomendable que juguéis un par de partidas en un mapa normal, sin bonificaciones de ningún tipo y con población media

              2 Explora el mapa rápidamente. Esto puede parecer obvio pero es fundamental saber dónde está cada cosa y es vital encontrar pueblos y fortines de oro sin guarnición antes que el enemigo, ya que estos pasaran a nosotros y podremos empezar a usarlos desde el principio

             3 El uso de fortines te proporcionara una excelente línea defensiva respecto a tus enemigos. Con una guarnición pequeña, puedes causar auténticos estragos entre las líneas enemigas, causando muchas bajas en poco tiempo

              4 Utiliza los campamentos teutones como una fuente de soldados. Estos jinetes son muy útiles tanto para hostigar como para explorar. Hacerte con ellos será fundamental para acosar sus rutas de aprovisionamiento, pero tienen un añadido más que viene muy bien al principio, que es tener 12 soldados adicionales por campamento capturado que además son muy rápidos para descubrir el mapa

               5 Recuerda que juegas contra humanos. Un jugador humano no puede estar a todo lo que pasa en el mapa al mismo tiempo, por lo que si eres capaz de desbordarlo con ataques de acoso y demás, se distraerá y cometerá errores o, en su defecto, perderá algunos minutos en mirar a ver qué pasa y demás. Al mismo tiempo no cometerá ciertos errores que comete la inteligencia artificial del juego, así que vete pensando en cambiar el chip en el modo liga

               6 Normalmente tendemos a usar ejércitos con líder. Aquí tendremos que usar grupos de guerreros (normalmente caballería) para que nuestros ejércitos principales se muevan con seguridad.  La función de estas avanzadillas es la de localizar al ejercito enemigo, conquistar pueblos y fortines, tragarse ellos las trampas etc. Intenta no usarlos para combatir a no ser que sea estrictamente necesario

              7 Aquí se podría entrar en un debate sobre si se debe o no se debe. Aun así, yo soy partidario de hacer focus sobre los héroes enemigos. Un héroe es una pieza clave del ejercito enemigo y posee una importancia capital (bonifica a los soldados, les da nivel, habilidades etc.) aparte de que con ciertos objetos causa muchas bajas. Si podéis eliminar al líder enemigo con proyectiles o con un fortín, os recomiendo que lo hagáis (Aunque seguramente más de un adversario os insulte y se desconecte por hacer tal cosa)

             8 En el modo liga, por lo general, todos los recursos escasean y mucho, y con ello los soldados. Cada mula que consigas capturar, cada soldado que consigas matar sin peligro y demás, son pequeñas ventajas que se irán acumulando y que pueden darte la victoria final. Aun así no desperdicies excesivo tiempo en hacer esto, ya que quizás dejes de realizar tareas aún más vitales para tu ejército

            9 Plantear bien tus batallas cobra más importancia que nunca. Los ejércitos en el modo liga no suelen ser gigantescos ni suelen sacarse en mucha cantidad, así que cada batalla cobra una importancia capital. Localiza al enemigo, atráele, usar los fortines, déjale sin comida, usa ardides y todo lo que puedas, pero asegúrate de ganar todos y cada uno de los enfrentamientos con menores bajas que el enemigo y, si se retira, cuidado no te arrojes a una trampa de cabeza (recuerda que son humanos y los humanos hacen estrategias más elaboradas que la máquina, que si pierde simplemente se va y deja que aniquiles a sus tropas en la retirada)

             10 Por ultimo, sigue los consejos referentes a los ejércitos de este blog y adáptalos a tus enemigos.

Espero que os sirva de ayuda para vuestros enfrentamientos en este divertido pero despiadado modo de juego.

jueves, 17 de abril de 2014

Unificación imperial: Europa Universalis III


                Todo aquel que sea un fanático de la geo-política y la geo-estrategia, conocerá este gran juego. Para el que no lo conozca, debería estar instalándose este juego ahora mismo (o el IV si su ordenador carbura bien)


                Hoy os vengo a comentar una de las acciones más difíciles y divertidas de llevar a cabo en el juego, y es la creación del Sacro Imperio Romano Germano. En la vida real, el Sacro Imperio fue una federación de estados compuesto de muchos principados, reinos, ducados, arzobispados y demás donde 7 de sus más de 40 miembros elegían al emperador. En el juego es más o menos lo mismo, solo que aquí podemos unificar el imperio con poder efectivo y convertirnos en una grandísima potencia


Reinos propicios para la unificación

                Aunque en principio cualquier miembro del Sacro Imperio puede ser emperador, hay algunos que son mucho más poderosos y nos facilitaran la tarea. Os pondré, bajo mi punto de vista, de mejor a peor cuales deberíais elegir:

                -Bohemia: Es la joya de la corona. Comienzas siendo el emperador, cuentas con un buen número de tropas y regiones ricas. Aparte está bien situado, ya que, si exceptuamos a Austria, no tiene ningún rival realmente peligroso

                -Austria: Es el segundo reino más peligroso. Tiene una situación muy parecida a la de Bohemia y  no le costara ser emperador si la otra de debilita

                -Borgoña: Para mi seria la potencia más poderosa si no fuese porque tiene a Francia al lado. Es muy complicado centrarte en el tema imperial si cada dos por tres tiene a toda Francia pinchándote la espalda

                -Baviera: Un gran reto dentro de las grandes. Tendrá grandes problemas para expandirse dentro del Imperio y tendrá cerca a Austria y a Bohemia, por lo que su esperanza de vida tiende a 0 si intenta ir por las malas


Objetivos a cumplir

                El primer objetivo siempre será conseguir la elección en caso de que no seamos el emperador y la reelección si ya lo somos. La verdad que conseguirlo no es muy complicado, ya que nos vale con hacer vasallos a todos (o al menos a 4) los electores. Con ello nos aseguramos que en las votaciones tendremos los votos suficientes para convertirnos en emperador. Vigila también tu legitimidad, infamia y prestigio y todo irá bien

                Haz muchos, muchos vasallos. Si consigues que todos los pequeños principados sean vasallos y aliados, ganaras por paliza todas las guerras. Tú simplemente encárgate con tu ejército de los ejércitos grandes del enemigo y deja que tus vasallos se hagan con los territorios. Son muy eficientes en esta tarea y los conquistaran en tu nombre

                Una vez seas emperador y tengas muchos vasallos, tendrás que asegurar tu puesto dentro del imperio, por lo que tendrás que soplar los morros a Bohemia, Austria y/o a Borgoña (dependiendo de quién seas tú) Debilitarlos tiene que ser una prioridad

                Tienes que tener muy presente que bajo ningún concepto debes expandirte fuera de los límites del imperio (a no ser que tengas un núcleo en la provincia de otro país) Por cada territorio que controles que no sea del imperio, se aumentara tu infamia y solo podrás quitarte esta penalización integrando dicho territorio al imperio, pero necesitas un núcleo, por lo que te comerás 50 años de infamia que acabara por condenarte (NOTA: Si puedes soltar esos territorios creando vasallos mejor). Así mismo, anexionarte principados imperiales está mal visto, asi que mejor avasalla y quita territorios pero no te los anexiones.

                Ahora llega la parte importante: Hay que ganar puntos imperiales. Se ganan de muchas maneras y variadas maneras, pero todas se resumen en ayudar al imperio. Luego, cada 50 puntos, te dejaran hacer una reforma en el imperio. Algunas son muy beneficiosas y otras perjudiciales, pero has de pasar por todas para llegar a la última, que es la unificación.

                Las maneras más eficientes de ganar puntos:

                -Responde a la llamada de los miembros imperiales. Ganar una guerra iniciada desde el exterior son 10 puntos muy valiosos y te da muchos puntos con las regiones imperiales
                -Haz reaparecer príncipes anexionados por naciones no imperiales y no imperiales. Un gran truco que puedes hacer (cuando el imperio es hereditario preferiblemente) es avasallar un principado y darle alianza y matrimonio. En 10 años podrás anexionártelo y luego podrás liberarlo, con lo que te llevas 10 puntos cada vez que hagas esto
                -Una vez tengas muchos vasallos, busca ser excomulgado. Esto hará que el resto de países te ataque sí, pero desde fuera, por lo que todo el poder del imperio caerá sobre ellos y tu ganaras de nuevo 10 puntos por guerra.
                -Las primeras reformas son muy interesantes y te darán bonificaciones muy valiosas, así que nada más reunir 50 puntos hazlas. Las del final dan muchas penalizaciones, sobre todo a la infamia, por lo que quizás sea prudente realizar dos reformas a la vez (100 puntos)

                Con esto, podrás unificar al Imperio en no mucho tiempo y sabrás lo que es el poder: Muchísimos ingresos (y mas pasado los 50 años de la unificación, ya que se crean núcleos donde no los tenías), ejércitos enormes, tecnología puntera y demás. Ninguna nación podrá hacerte frente, solo molestar (España y UK, porque Francia se habrá metido contigo en tu etapa de emperador y entre tú y tus vasallos la habréis desmembrado) o caer de rodillas irremediablemente (todo el este con tecnología pobres y atrasada no tendrá oportunidad)

sábado, 12 de abril de 2014

Juego de frentes: Rol y estrategia

Hola a todos. Hace tiempo, en mis días de jugador empedernido de Warhammer, que desarrolle un juego de rol y estrategia para todos los amantes del juego. Hoy buscando entre mis archivos, lo he encontrado y quiero compartirlo con vosotros.

El juego es bastante simple: Dos o más ejércitos enzarzados en una lucha a muerte donde cada uno debe cumplir sus objetivos de la mejor manera que pueda. A vuestra disposición os dejara las reglas (aunque realmente son directrices para hacer que vuestras batallas sean más divertidas) Podéis modificarlas a vuestro antojo con todas mis bendiciones (o simplemente usarlo como base para vuestros juegos)

Disfrutad y estoy a vuestra entera disposición para aclarar cualquier duda y aceptar nuevas sugerencias

http://dfiles.eu/files/b8ti9v6g8

http://dfiles.eu/files/fosvf8kv7

http://dfiles.eu/files/3s8nxpx55 

http://dfiles.eu/files/nk5lpocde